viernes, 15 de febrero de 2019

PERCEPCIÓN Y CONOCIMIENTO


PERCEPCIÓN Y CONOCIMIENTO


Los seres humanos no podemos ni percibir ni conocer absolutamente toda la realidad. En primer lugar, es imposible percibir toda la información que produce ésta debido a la propia anatomía humana. Nuestro cuerpo, entendido como el conjunto de sistema y órganos que nos permite existir, y sin entrar por tanto en el terreno de lo metafísico, posee ciertos límites que nos impiden la plena percepción de los estímulos externos. Esto debe a la existencia de los denominados umbrales de percepción, que actúan omitiendo todos aquellas sensaciones procedentes de estímulos que se encuentren por debajo de nuestro umbral absoluto mínimo, así como aquellas que superan nuestro umbral absoluto máximo. 

Nuestros sentidos, por tanto, necesitan una determinada calidad y cualidad de estímulo para poder captar la información. Es por ello que somos incapaces de sentir los microscópicos ácaros que recorren continuamente nuestro cuerpo, al igual que no percibimos la increíble fuerza que produce sobre nosotros la gravedad, ni somos capaces de oír ciertas frecuencias de sonido. Además, no podemos afirmar con certeza que lo percibido por nuestro cuerpo se complemente fielmente con la realidad, lo que nos lleva a admitir de nuevo que esta realidad es imposible de ser percibida en su conjunto.

De la misma manera somos incapaces de conocer totalmente la realidad, lo que deriva de nuestro modo de conocer, limitado por la percepción. Resulta imposible conocer todo  aquello que no se percibe, lo que parece claro, pero además lo que sí se conoce, se debe ajustar a la manera en la que percibimos, a nuestros sentidos. Por ello, podemos negar el hecho de llegar a conocer la realidad de forma absoluta.


Muchos filósofos, pensadores e intelectuales han debatido a lo largo de toda la historia acerca de esta cuestión, señalando todos ellos diversas formas de percepción y conocimiento. No obstante, la ciencia y a los profundos descubrimientos y avances que se han logrado en el terreno del cerebro, han ayudado a aclarar estas dudas, por lo que podemos afirmar que somos incapaces tanto de conocer como de percibir toda la realidad.


No hay comentarios:

Publicar un comentario